Cada vez más la tecnología se adapta mejor a nuestras vidas de una forma que parece mágica. Hace un tiempo que aparecieron en el mercado las freidoras de aire o también conocidas como freidoras sin aceite. Estos electrodomésticos han cambiado la manera de freír los alimentos, ahora de una forma más saludable. Son muchas las personas que ya se han interesado por este producto que permite seguir comiendo alimentos sabrosos y a la vez más ligeros. Su funcionamiento se caracteriza por ser muy sencillo y practico. ¿Pero, vale tanto la pena?
Las freidoras sin aceite funcionan con resistencia eléctrica, parecido al funcionamiento de un hornillo. En su interior, circula aire caliente que hace que los alimentos se cocinen rápidamente.
Los alimentos se meten en una cesta extraíble como en cualquier freidora convencional, pero con la diferencia que esta, solo necesita una cucharada de aceite o incluso sin nada, (dependiendo del tipo de producto). Para programarla solo es necesario seleccionar el tiempo de cocción y la temperatura deseada.
El resultado final no tiene nada que envidiar de las freidoras convencionales, sí que es cierto que pueden perder un poco de sabor debido a la falta de aceite, pero ganamos en salud y además es más seguro al cocinar sin aceites.
¿Qué tener en cuenta a la hora de comprar una freidora sin aceite?
La capacidad es una de las características más importantes a tener en cuenta, ya que de ello dependerán las raciones. Las freidoras pequeñas son ideales para parejas o pocos miembros de familia con una capacidad de 3 a 5 litros. Para familias de 3-4 miembros es mejor freidoras medianas de 5 a 5,5 litros. Para familias numerosas o para restauración también hay freidoras de gran capacidad que serían las de 6 litros o más.
La potencia que alcanza la freidora es una característica destacable ya que, a mayor potencia, mayor temperatura alcanzara la freidora.
La freidora puede tener diferentes programas preestablecidos que pueden hacer el cocinado más práctico.
Hay algunas freidoras que vienen con diferentes accesorios incorporados para preparar alimentos concretos que también pueden ser de ayuda a la hora de escoger un modelo u otro.
También hay que tener en cuenta si son fáciles de limpiar o si son aptas para lavar con lavavajillas.
Así que ya sabéis, si estáis pensando en llevar una dieta más sana, sin grasas que sea de forma rápida, segura y sencilla la freidora sin aceites es una buena compra. Además, este tipo de freidoras permiten cocinar diferentes productos, elaborar múltiples recetas que se alejan del estilo “frito” que antes conocías.
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